CTC conoce in situ los planes de desmantelamiento de Garoña
El desmantelamiento de una central nuclear no es un proceso que esté a nuestro alcance todos los días. Se trata de una labor multidisciplinar y compleja, que exige un elevado grado de conocimiento. Una comitiva del Clúster de la Industria Nuclear de Cantabria (CINC) pudo conocer de primera mano el corazón de la central nuclear de Santa María de Garoña: una instalación que está en la fase embrionaria de su desmantelamiento.
Los investigadores de CTC que participaron en la visita han aprovechado la expedición para conocer de primera mano los procesos en dónde el único centro tecnológico de la región podría aportar su conocimiento. Actualmente, CTC trabaja en diversos proyectos relacionados con el sector como las aplicaciones de grafeno en el sector nuclear para la eliminación de isótopos radiactivos en aguas contaminadas, la ingeniería avanzada, la optimización en planes de mantenimiento mediante modelos numéricos y algoritmos, así como la localización de personas en interiores o los sistemas de navegación para vehículos autónomos.
Por tanto, esta visita se presentó como una oportunidad única para acceder a infraestructuras de paso restringido: como el edificio de contención, la piscina de combustible y el reactor, entre otras partes. Siempre resulta interesante conocer los mecanismos internos de una instalación que ha sido ejemplo de funcionamiento ininterrumpido y alto grado de disponibilidad en las mayores condiciones de seguridad durante 30 años.
Además, durante la jornada, se presentaron las diferentes fases por las cuales pasará Garoña en esta nueva etapa de desmantelamiento, haciendo especial hincapié en aquellas actividades en las que el Clúster de la Industria Nuclear de Cantabria podría aportar valor y trabajo.
La visita del Clúster contó con un guía de excepción, Fernando Corchón, (NUCLENOR), quien cuenta con una envidiable trayectoria en la ingeniería de planta desde sus comienzos.