Sin innovación, no hay futuro

El Centro Tecnológico CTC postula la innovación como una de las palancas fundamentales para incrementar la competitividad del tejido productivo de la región. Una apuesta decidida por un modelo de negocio que incorpore soluciones relacionadas con la I+D+i es una de las alternativas más indicadas para hacer frente a la situación de incertidumbre que atraviesa el sector industrial. Diferenciarse del resto gracias a procesos de transferencia tecnológica supone abrir una vía para garantizar la sostenibilidad empresarial a medio y largo plazo.

Ante esta necesidad que acucia a buena parte de la industria cántabra, el único centro tecnológico de la región se presenta como aliado estratégico de las empresas para diseñar y ejecutar proyectos que les ayuden a mirar hacia adelante con una perspectiva más optimista.

Según la Encuesta de percepción social de la innovación en España, recientemente publicada por Cotec, tres de cada cuatro ciudadanos tienen una visión positiva de la innovación. Un dato que indica cierta pérdida de confianza respecto a años anteriores, pero que revela un sentir mayoritario sobre los beneficios aparejados a los proyectos innovadores.

En ese sentido, CTC dispone de una estructura con una clara orientación al mercado que redunda en el beneficio de las empresas. La elevada especialización de su equipo investigador se suma a un profundo conocimiento del mercado y sus oportunidades para plantear proyectos ad hoc enfocados a solucionar retos tecnológicos. De hecho, los Project Manager de CTC hablan el mismo idioma que los empresarios, son conscientes de sus dificultades y tratan de ofrecer alternativas que incidan positivamente en los procesos productivos. Así resulta fácil comprender como buena parte de las grandes empresas de la región han acometido o están acometiendo distintas iniciativas de la mano de CTC.

Desde Textil Santanderina, con quien el Centro Tecnológico diseñó un tejido ignífugo para ropa técnica, hasta Bathco, que lanzó una nueva línea de productos gracias a un hormigón nanoaditivado más resistente y menos permeable, pasando por industrias de todo tipo como Aspla, SEG Automotive, Sidenor, Astander, Gamesa, Grupo Gomur, Ensa, Edscha o Viesgo. Asimismo, entidades relevantes la constructora Dragados o la firma de pinturas Hempel también han confiado en CTC para ejecutar parte de sus proyectos de innovación.

Por último, cabe significar que la innovación no es patrimonio exclusivo de las grandes firmas nacionales e internacionales. De hecho, CTC ha ejecutado múltiples proyectos para pymes que han ayudado a las medianas y pequeñas empresas a ser más competitivas en el entorno económico actual. Firmas como DEGIMA, Zunibal, Enwesa o Acorde Technologies conocen de primera mano las ventajas que tiene invertir en innovación.