Bienvenidos a la cuarta revolución industrial
Todos los cinéfilos sabrán quién es HAL 9000. Este súper computador de a bordo, que vertebra el argumento de un clásico de la ciencia ficción como “2001: Una odisea en el espacio”, tenía la capacidad de controlar las funciones vitales de la nave espacial Discovery. Es decir, monitorizaba y gestionaba su funcionamiento de forma autónoma. Este planteamiento, que parecía inalcanzable cuando fue ideado por Stanley Kubrick y el escritor Arthur C. Clarke en 1968, está cada vez más cerca de hacerse realidad gracias a la irrupción de los gemelos digitales. Una tecnología incipiente llamada a revolucionar, entre otros muchos ámbitos, la producción industrial.

Hall 9000
A pesar de que esta tecnología estuviese presente en trabajos realizados por la NASA a finales de los 80, este concepto comenzó a aplicarse en la industria 4.0 a partir de 2003. El ingeniero informático Michael Grieves lo utilizó en una conferencia sobre la gestión del ciclo de vida de un producto. Desde entonces, los avances en tecnologías como el Big Data, el Machine Learning o el Internet de las Cosas han facilitado su desarrollo.
Actualmente, los gemelos digitales se aplican en sectores de alto valor añadido, como son el Oil and Gas y el nuclear. En ambos casos, disponer de un gemelo digital aporta información relevante sobre el ciclo productivo completo: desde el proceso de construcción hasta el desmantelamiento, con un gran impacto potencial en la operación y mantenimiento de las industrias. Por ejemplo, se puede disponer de un gemelo digital de una tubería para controlar su proceso de degradación y conocer en todo momento cómo está esa infraestructura. Incluso de un tanque a presión, tal y como se formula en el proyecto Twincan que lidera el Centro Tecnológico CTC.
En cualquier caso, ya sea en estos sectores o en otros menos maduros como las energías renovables marinas, los gemelos digitales industriales constituyen una herramienta sin igual para implementar metodologías de mantenimiento predictivo. Estas replicas virtuales permiten disponer de un control riguroso del rendimiento de estructuras y componentes, ayudan a prevenir tiempos de inactividad y permiten planificar escenarios futuros.
Los gemelos digitales son una tecnología que aún está por explotar a nivel internacional. Hoy por hoy, todavía son necesarios proyectos innovadores que permitan acelerar la implantación de esta tecnología en los procesos industriales. En España, se ha definido como una de las tecnologías prioritarias de la Red Cervera. Es decir, estamos ante una tecnología considerada relevante para el desarrollo económico nacional a medio y largo plazo.
El tejido industrial de Cantabria no es ajeno a esta tendencia global. Actualmente, los gemelos digitales constituyen un campo por explorar que debe revertir en una optimización de sus procesos productivos y sus metodologías de mantenimiento. Es decir, su llegada a la industria incrementará su competitividad.
La implantación de un gemelo digital no es un proceso que se pueda completar de la noche a la mañana. En ese aspecto, CTC constituye un socio tecnológico perfecto para que cualquier entidad industrial implemente una mejora basada en gemelos digitales. ¿Hablamos?
Director de Desarrollo de Negocio. Centro Tecnológico CTC