La importancia de la precisión

Viajar es maravilloso. Subirnos a un avión y marcharnos lejos, a conocer nuevos países, nuevas culturas y nuevas lenguas. Y mientras estamos sentado en nuestra butaca, sobrevolando las nubes, no reflexionamos acerca del aterrizaje. Hace 50 años no se pensaba que un avión pudiera aterrizar con exactitud y completa precisión dentro de la pista y ahora mismo no lo dudas. Simplemente te sientas y disfrutas del vuelo.

Esa tranquilidad que nos evita pensar en el aterrizaje nos la dan las técnicas de posicionamiento basadas en GNSS (Global Navigation Satellite System). A través de las señales satelitales que captan los receptores integrados en el avión, este es capaz de llegar a la pista de aterrizaje y deslizarse sobre ella de forma precisa, con apenas desviación de unos pocos metros, y no en mitad de un campo al otro lado del aeropuerto.

Los sistemas de posicionamiento han ido evolucionando a la par que crecía la necesidad de desarrollar nuevas soluciones, aumentando su exactitud y creando técnicas mucho más precisas para aplicaciones concretas. Por ejemplo para el correcto funcionamiento de los coches autónomos, cuya pista es mucho más pequeña y ajustada que la de los aviones y un error de pocos metros puede llevar a que se salga del carril. Por ello, para este tipo de aplicaciones se emplean técnicas de posicionamiento preciso como RTK (Real Time Kinematics) o PPP (Precise Point Positioning).

En concreto, la técnica PPP, cuya finalidad es proporcionar una precisión centimétrica en poco tiempo y en cualquier punto del planeta, se encuentra en pleno auge, y no sólo para desarrollar soluciones dentro de importantes empresas tecnológicas o grandes proyectos innovadores. Al igual que los coches autónomos, los drones, que apenas aparecieron hace unos pocos años y ya forman parte del día a día de muchas personas, se manejan gracias a este sistema de posicionamiento.

CTC

No obstante, el uso del PPP es más complejo de lo que aparenta. Las señales que se captan de los satélites, como GPS y Galileo, son las mismas que las de otros sistemas de posicionamiento. Si habéis utilizado alguna vez la aplicación de “MAPS” del teléfono sabréis que las indicaciones no son siempre exactas. En general, las señales de posicionamiento cuentan con un margen de error más amplio, por lo que, para alcanzar la precisión que el PPP exige, se deben filtrar, corregir y, sobre todo, programar para que la señal actúe en el momento en el que debe, ni más tarde ni antes de tiempo. Básicamente, aplicar una serie de correcciones matemáticas para alcanzar la precisión centimétrica necesaria.

Además, esta tecnología cuenta con muy diversas aplicaciones, muchas más de las que jamás nos hubiéramos imaginado. Pensamos en el posicionamiento preciso como el GPS, un sistema que nos ayuda a llegar de un lugar a otro. Sin embargo, ofrece numerosas oportunidades de desarrollo y cada vez se encuentran más beneficios a su utilización.

Esquema MooringSense

Ejemplo de ello es el proyecto MooringSense, una iniciativa europea liderada por el Centro Tecnológico CTC, que aspira a reducir entre un 10 y un 15% los costes asociados a la producción de energía eólica marina flotante. El proyecto tiene por objetivo mejorar la eficiencia de las estructuras de los aerogeneradores. Se estima que las líneas de amarre, los elementos que sujetan las estructuras flotantes, se encuentran bajo agua alrededor de 20 o 25 años, tiempo durante el cual se ven afectadas por los golpes del agua y la agresividad del ambiente marítimo. CTC, a través de la navegación por satélite GNSS que utiliza el Posicionamiento Puntual Preciso, tiene el objetivo de estimar la posición y orientación de la plataforma para así, a posteriori, estimar el estado de las líneas de amarre y determinar su vida útil. De esta manera, se puede conocer cuando es necesario reparar las sujeciones de las estructuras.

Sin embargo, este proyecto es tan solo una muestra de la utilidad del PPP. Se trata de una solución que aún tiene mucho por mejorar, por seguir creciendo, y que, con el tiempo, tendrá aplicaciones que parecerán sacadas de una película de ciencia ficción. Lo que conocemos ahora es tan solo el comienzo de todas las soluciones que puede aportar a través de los sistemas de posicionamiento de alta precisión.

Neus Revert Calabuig

Jefa de Proyectos

Centro Tecnológico CTC